Cuando se conocen diversas personas a lo largo de la vida, uno tiene la oportunidad de observar distintas filosofías, estilos y modos de pensar, así como maneras de ser. Muchas personas que llegan a tu vida pueden tocarte de una manera que dejan una huella imborrable, marcas que no se quitan aunque pase el tiempo y las memorias se desgasten. Otra gente sin embargo es experta en el arte de ser imperceptibles, es decir, pasan por la vida sin pena ni gloria, son como ráfagas de viento que soplan una mañana de invierno, supiste que estuvo ahí mas no le das importancia porque sabes que vendrán más tarde o temprano, porque son comunes, son usuales y predecibles. No le tomas en cuenta, no le sumas, no le restas, para ti su sola presencia te causa un único estado: INDIFERENCIA.
Hay personas que son maestras para NO dejar huella, para ser insípidas estatuas tristes y GRISES. Su presencia no importa, no son notables, sus comentarios rara vez son valorados y cuando alguien les pone atención producto de una mezcla entre misericordia y lástima, entiende que su vida no ha variado en absolutamente nada desde que conoció a ese Gris y sus intervenciones.
Los grises no se preocupan por nada, ni siquiera por sí mismos, descuidan su manera de actuar, su manera de hablar y de moverse es débil, torpe y al azar, a los grises les da igual el mejoramiento y el estancamiento, descuidan su apariencia personal y lucen como el más común de los corrientes, les da igual si es día o es de noche, total, no importa nada de lo que pase. Los grises no tienen planes de vida, ni metas, ni mucho menos ganas de ser felices, su vida es una línea recta y rutinaria baja de emociones y energía. Los grises son conformistas, no desean sacar de la vida todo lo que pueden, no conocen sus motivaciones o sus defectos y ”no sé” es el 99% de las respuestas a dudas existenciales de un gris. A veces los grises ni siquiera tienen dudas existenciales, no se preguntan Por qué? Para Qué? o Cómo? Para ellos lo que tienen es suficiente, lo que saben es lo que necesitan y no quieren ni desean más, un Gris nunca ambiciona positivamente nada.
Los grises son personas aburridas, ni siquiera poseen sentido del humor, y mucho menos se preocupan por mejorar sus relaciones interpersonales, su baja energía se siente a kilómetros de distancia y cuando te hablan puedes sentir que su presencia es fácilmente evitable, o peor aún, deseas evitarles desde el preciso momento antes de que se te acerquen (si es que se acercan a alguien), a los grises no les gusta hacerse notar, nunca desean figurar positivamente en nada. Un gris no tiene temas de conversación inteligentes, es triste y apagado por naturaleza, su vida se limita a respirar y hacer lo que otros le digan, el Gris no tiene iniciativa propia y siempre espera que los demás piensen por él, que actúen por él. Los grises son casi el antecedente a un espectro insípido, no podría decir que los Grises son como los fantasmas, porque existen fantasmas con Carisma y divertidos, y si no me crees mira a Gasparín. Un hombre Gris no logrará tener lo que desea de la vida a menos que se decida a cambiar y a brillar, UN GRIS NO PUEDE LLEGAR A SER UN SEDUCTOR COMPLETO hasta que decida hacer un giro a su personalidad.
El ser Gris es un estado que lamentablemente muchos viven, un estado de energía baja y causante de muchas decepciones, e incluso depresiones, un estado que a menos que decidas cambiar puede ocasionarte mucho daño en tus expectativas de tu Vida de Seductor. Y ojo con esto! cuando hablo de un Gris no me refiero a una persona que padece de Depresión o de algún problema similar, la Depresión es una enfermedad que debe ser tratada propiamente y no tiene NADA que ver con lo anterior descrito, el post de hoy se refiere a ese típico hombre que es Gris por escogencia, no por enfermedad. Y digo por escogencia porque las personas podemos trabajar en el mejoramiento del yo interior si así lo queremos , es decir, si así lo ESCOGEMOS. Un gris le huye a las palabras Superación y Autoestima como un ratón huye de un gato, para un Gris esas palabras son motivo de miedo y hasta enojo.
Lograr ser un Seductor cuando posees una personalidad Gris, no es tan difícil, lo que es realmente difícil es cuando tu no deseas hacer un cambio por ti mismo, por tus ilusiones y expectativas, nada gano yo con decirte ”No seas un Gris” si en tu interior es esa la manera como quieres continuar tu vida, y creeme, si ser un Gris es lo que deseas y buscas, definitivamente puedes cerrar esta página y no volverla a ver nunca más.
Los grises NO atraen mujeres, los grises son personas que contagian su baja energía a los demás y no deja que se sientan cómodos a su lado, una mujer desea un hombre que la haga sentir cómoda, y a la vez atraída, y si no logras crear estas sensaciones en ella, y si ella te evita, y si crees que presentas algunas carácterísticas de Macho Gris (u Omega, como quieran llamarlo) , es mejor que tomes una verdadera desicion si lo que deseas es obtener mejores relaciones interpersonales, dejar la timidez a un lado y conocer una mujer que definitivamente llene TODAS tus expectativas .
Y creeme, esa desición está muy distante de escoger ser o seguir siendo un gris.
“Nadie puede ser esclavo de su identidad: cuando surge una posibilidad de cambio, hay que cambiar.” Elliot Gould
Comentarios
Efectivamente, el ego es el principal impedimento para conseguir los resultados buscados en la seducción. Una persona puede ser una biblioteca andante, pero si no tiene la suficiente confianza en sí mismo para abordar a una mujer, empezar una conversación, y escalar hacia un contexto claro de ligue y seducción, toda la información que ha aprendido no le sirve absolutamente para nada. Y esto tan básico y tan importante es algo que muchos expertos en seducción ni siquiera mencionan en su web.
El gris puede recuperarse y dejar de ser gris aunque es muy dificil. Con voluntad todo se puede.